Si ve un murciélago, sepa qué hacer
Unos cuantos murciélagos alteraron la actividad cotidiana de un CESFAM en la comuna de Sagrada Familia y obligaron a alertar a la comunidad acerca de los riesgos que puede acarrear el contacto directo con ellos.
Los murciélagos no son pájaros. Son mamíferos voladores. Miden entre 6 y 12 centímetros y pesan entre 15 y 20 gramos. Su color puede ir de café a gris oscuro.
Los que habitan en Chile se alimentan de insectos voladores nocturnos como polillas y zancudos. Aunque no ven bien, cuenta con un sistema parecido a un sonar que emite vibraciones y les permite moverse hábilmente en la oscuridad, evitar obstáculos y encontrar sus presas. Viven en grupos llamados colonias y en invierno se mantienen en hibernación. Por eso, es posible verlos en los atardeceres y durante las noches de primavera y verano cuando salen en busca de alimento.
¿Cuáles son los riesgos de tocarlos?
Los murciélagos se encuentran en todo el mundo, excepto en las cercanías de los polos. En Chile están presentes prácticamente en todo el territorio y dado el importante rol que desarrollan en el ecosistema están protegidos por ley.
Estos mamíferos se asocian con enfermedades muy graves y potencialmente mortales para las personas. Por ejemplo, son un reservorio natural y endémico de la rabia. Cuando están infectados, suelen ser torpes, tener dificultades para volar y estar desorientados lo que favorece que entren en contacto con los humanos.
¿Qué hacer?
Si ve murciélagos en el entorno de su hogar, es preciso adoptar algunas medidas:
NUNCA toque un murciélago. Si usted o un cercano lo hizo, lave la zona con agua y jabón y acuda a un centro asistencial.
AVISE a la autoridad sanitaria para que personal capacitado y dotado de equipos de protección personal adopte las medidas necesarias.
CIERRE puertas y ventanas por las noches para evitar la entrada de los murciélagos y encienda luces.